Este fin de semana tendrá lugar una nueva final de División de Honor masculina en la que los dos finalistas pertenecen a la misma comunidad autónoma, en este caso Castilla y León con el VRAC Quesos Entrepinares y el Recoletas Burgos – Universidad de Burgos. La última vez que ocurrió algo similar fue en la 19-20, cuando los dos equipos vallisoletanos también quedaron primero y segundo (aunque sin disputar una final por el Covid) por quinta vez consecutiva. Esta región es la que más veces ha finalizado tanto campeón como subcampeón de la primera división del rugby masculino español, pero no fue la primera… Ese honor se lo llevó Castilla la Nueva, en la temporada 1972-1973.
Esta será la séptima ocasión en la que Castilla y León inscriba su nombre tanto para el primero como para el segundo de la DH masculina. Y, de hecho, es la única comunidad autónoma que puede presumir de ello con permiso de Madrid o Castilla la Nueva, según se quiera mirar. Pese a la gran fortaleza de País Vasco o Cataluña a lo largo de la historia de nuestro rugby, en ninguna de las 54 temporadas de lo que hoy en día se conoce como División de Honor (anteriormente Copa Presidente del Gobierno y Liga Nacional de Primera División) se ha visto un campeón y subcampeón de alguna de esas regiones en la misma termporada. De hecho, este año será el undécimo en el que se dé esta circunstancia (cuatro para Madrid (Castilla la Nueva) y siete para Castilla y León).
La primera vez que se dio un campeón y subcampeón de la misma región fue en la 1972-73, cuando el Canoe NC Madrid finalizó por delante del CD Arquitectura en la clasificación de la Liga Nacional de Primera División (no había final o playoffs como actualmente). Dos equipos madrileños pertenecientes a la región de Castilla la Nueva -región que desaparecería a partir de lo que se preveía en la Constitución Española de 1978- y que competían bajo la licencia de la Federación Castellana, situada en la c/ Arlabán, 7, junto al céntrico metro Sevilla.
En esa temporada, en los últimos coletazos de la dictadura, la Liga Nacional de Primera División todavía era cosa prácticamente en exclusiva de dos ciudades: Barcelona, con 5 clubes, y Madrid, con 3 clubes. El Salvador (Valladolid) y el Atlético San Sebastián (Donostia) eran los otros dos clubes participantes en la máxima competición.
Del Canoe al Arquitectura
Era una época en la que el Canoe reinaba en el rugby nacional, habiendo logrado tres títulos ligueros consecutivos entre 1971 y 1973 (posteriormente sumaría otros dos a su palmarés) y tomaría el relevo precisamente su rival de aquella liga de 1972-73, el CD Arquitectura, que ganaría tres de los siguientes cuatro campeonatos -el otro fue para el también madrileño Cisneros (75-76), quien precisamente había ascendido a Primera en esa 72-73-. De este modo, entre 1971 y 1977, el rugby español sólo vio vencer a equipos madrileños.
En esa 1972-73, El Salvador terminó tercero y Valladolid aún no tenía ninguna liga en sus vitrinas. No obstante, su potencial se podía ver por los dos subcampeonatos de este equipo en la 70-71 y 71-72 y porque en esta 72-73 se confeccionó una selección de Valladolid que disputó un partido internacional frente a Polonia el 6 de diciembre. En Pucela se estaba cociendo una afición por el rugby que a día de hoy es una importante representación del oval nacional.
Entre tanto, en 1973 alzó la Copa del Generalísimo el Atlético San Sebastián y el Colegio San José (Valladolid) se proclamó campeón de España juvenil.
El España-Polonia de las duchas con agua caliente
Por su parte, la Selección española jugó el 8 de diciembre ante Polonia en el campo Central de Ciudad Universitaria para conmemorar el 29 aniversario de la inauguración de las instalaciones estrenándose ese día unos nuevos vestuarios con agua caliente en las duchas… La crónica de RTVE de ese partido, además de destacar la “victoria hispánica” por 3-0, resaltó el barro que casi impedía ver el dorsal y rostro de los jugadores al término del encuentro. La selección polaca, además de vérselas ante Los Leones y anteriormente con una selección de Valladolid, también jugó unos días más tarde con una selección de Sevilla.
Era una época en la que Los Leones viajaron a Inglaterra como parte de su preparación y que se enfrentaron a Marruecos en Casablanca en la VIII Copa Fira (estando dicho país encuadrado dentro de la Federación Internacional de Rugby Amateur, que ha desencadenado en la actual Rugby Europe), a Rumanía en Bucarest y a Francia Senior en Barcelona. Los Leones sólo vencieron en Casablanca (9-20) y terminaron terceros aquel campeonato que ganaron los galos con tres victorias en sus tres partidos.
Mucho ha cambiado en el panorama nacional y en el del rugby en estos 50 años de la primera vez que dos equipos de una misma región quedaron campeón y subcampeón de liga. Quizás, este sábado por la tarde, el Recoletas Burgos – Universidad logre hacer otro giro inédito en la historia del oval español con su primer título en la historia o, por lo contrario, el VRAC Quesos Entrepinares continúe haciendo valer su dominio incontestable sumando su duodécimo entorchado.
