Ante las declaraciones de Philippe Tayeb, presidente del club francés Aviron Bayonnais, el presidente de la Real Federación Española de Rugby (RFER), Juan Carlos Martín ‘Hansen’, y su directiva quieren aclarar lo siguiente:
Tras la celebración de una rueda de prensa en San Sebastián, convocada sin previo aviso al rugby español por parte del Aviron Bayonnais, la Real Sociedad y el Ayuntamiento de la ciudad, donde se anunció la celebración del partido de la Liga Nacional de Rugby (LNR) Top 14 entre el Aviron Bayonnais y el Toulon RC el próximo día 31 de marzo en el Estadio de Anoeta, el pasado 13 de febrero la RFER, ante la ausencia de una comunicación oficial por su parte, se dirigió al club organizador, Aviron Bayonnais, la LNR y la Federación Francesa de Rugby (FFR), para requerir información y solicitar la pertinente petición de autorización para la celebración del encuentro.
En esa primera comunicación, además, se propuso el necesario contacto para llegar a un acuerdo para aunar fuerzas en beneficio del rugby español, vasco y francés. Por ello, desde el primer momento las conversaciones que se han producido se han realizado en contacto permanente con el presidente de la Federación Vasca de Rugby.
La Federación basa su legítima petición en la Ley 39/2022, de 30 de diciembre, del deporte, así como la normativa de World Rugby, que especifica la necesidad de una autorización previa por parte de la Federación Nacional para la celebración de este tipo de acontecimientos deportivos.
Ante la sorprendente falta de respuesta alguna sobre lo solicitado, se reiteró la solicitud los días 21, 28 y 29 de febrero.
La RFER aclara que los hechos expuestos en el comunicado del Aviron Bayonnais no se corresponden con la realidad. El presidente de la Federación Vasca de Rugby, Iñaki Rica, fue requerido exclusivamente por el club organizador para vender entradas, en ningún caso para someter el evento a su aprobación.
Así mismo la RFER quiere exponer su rechazo a las afirmaciones que aparecen en el comunicado sobre el Sr. Rica. Iñaki cuenta con una dilatada experiencia en favor del rugby y ha sido y es una pieza clave en las relaciones transfronterizas de nuestro deporte.
A pesar del interés por parte de la RFER en promover este tipo de eventos en España, la Federación ha de velar por el retorno, el legado y beneficio deportivo de los mismos, para que no se circunscriban a simples operaciones financieras y de explotación de terceros donde el deporte de nuestro país se mantiene al margen, como ya ha ocurrido en anteriores ocasiones. Todo ello, priorizando nuestra involucración en estos acontecimientos, con el fin de aportar valor y dejar una herencia para el rugby nacional, antes que una mera aportación económica.
A fecha de hoy, a pesar de la posición incomprensible de los promotores del evento, la RFER va a permitir la celebración del encuentro gracias a la buena predisposición de las federaciones vasca y española y su buena relación con la Federación Francesa de Rugby.
El buen entendimiento entre la Federación y la FFR seguirá avanzando la segunda semana de mayo con otra reunión al más alto nivel entre ambos presidentes y sus equipos de estrategia, para estudiar acciones que permitan crecer a ambas federaciones en todas las áreas, en un movimiento natural entre dos países con tantos lazos en común. Está previsto, además, que se establezcan los términos de la celebración de competiciones del entorno de la Federación Francesa de Rugby en territorio español, respetando la normativa de World Rugby y la Ley del deporte y buscando al mismo tiempo que se contribuya conjuntamente al crecimiento del rugby.
La Real Federación Española de Rugby considera que los promotores del evento podrían haber seguido la normativa estatal y de World Rugby y, de haberlo hecho, podrían haber evitado llegar a este punto. Así mismo, la RFER entiende que, como organismo gestor de la actividad de rugby en España, ha de garantizar el mejor aprovechamiento deportivo del encuentro previsto, haciendo posible que un evento con las derivadas económicas anunciadas sea beneficioso, económica y socialmente, para el rugby vasco y español, algo que hasta el momento no se ha producido.