El Torneo Nacional de Rugby Base ha supuesto un nuevo éxito para el rugby nacional al marcar un nuevo record de participación ya que más de 2500 niños y niñas de entre 4 y 12 años han podido disfrutar de la fiesta del rugby en Valladolid en un fin de semana especial para Pucela. Comparado con las cifras del año pasado, donde acudieron 1800 niños y niñas, supone un incremento de participantes cercano al 30% con un aumento de 26 equipos en comparación con el 2015, se ha pasado de 128 a 154.
En un torneo en el que la competición pasa a un segundo plano, la diversión y la amistad toman protagonismo y dan más sentido si cabe a un evento que ha supuesto un récord de participación y un éxito en el desarrollo de nuestro deporte.
En los Campos de Pepe Rojo hemos podido ver a las futuras figuras del Rugby nacional que podremos ver en División de Honor y, a juzgar por el nivel exhibido, porque no soñar con que se conviertan en estrellas internacionales.
Hemos podido ver la pasión y entrega de los Linces y Jabatos que, al pisar al césped, dejaban de ser niños por un momento para convertirse en hombrecitos con un objetivo común, disfrutar con sus amigos del Rugby. Los prebenjamines y benjamines nos han demostrado la buena salud de la base del rugby nacional, sin bajar los brazos ni un solo momento, luchando como Leones, sin perder el respeto por el rival, el juego , los compañeros y el árbitro.
El Torneo Base 2016, al igual que lo fue el de 2015, ha sido un éxito en términos cualitativos y cuantitativos, pero sobre todo, el mayor logro del campeonato ha sido la demostración de que las escuelas en España trabajan mucho y bien y que, gracias a ellas, el futuro del Rugby español está asegurado.