Las Selecciones españolas de rugby 7s llegan a la cuarta cita de las Series Mundiales que se celebran en Vancouver con dos debutantes, una en la sección femenina y otro en la masculina, para reforzar el equipo y seguir introduciendo piernas frescas en los conjuntos nacionales. Denisse Gortazar y Jeremy Trevithick nos hacen un hueco en su apretada agenda para conocerlos un poco más de cerca a pocas horas de su posible debut en el prestigioso circuito internacional de 7s en el que se codearán con los y las mejores jugadoras a nivel global de la disciplina olímpica.
Denisse Gortazar (2001, Madrid) ha estado vinculada al deporte toda su vida “porque ya siendo una niña no podía parar quieta”. La lista de deportes que ha practicado es casi infinita “me inicié con el cross en el colegio y a la vez también hacía natación. Mientras, lo iba intercalando con otros deportes como fútbol o motorbike y un poco más mayor con 11 o 12 años me llamaron para correr en un club de atletismo. Poco después descubrí el triatlón, donde competí durante 5 años hasta que me vi saturada y decidí cambiar a algo que no conocía, probar algo nuevo. Ahí entra el rugby en mi vida, con 16 años”.
“Conocí el rugby por una compañera de clase de bachillerato”, continúa la veloz ala madrileña. “Justo acababa de dejar triatlón y como no puedo estar sin hacer nada tenía dos opciones: volver al fútbol o probar algo nuevo. Nunca había hecho ningún deporte de contacto y fue probarlo y me cautivó. Empecé en Torrelodones, estuve allí tres temporadas, y fue un periodo de aprendizaje total. Después quise dar un salto a DHB a Industriales y allí seguí formándome en las bases del deporte. Fue una gran etapa, y luego decidí dar el salto a la Liga Iberdrola, a Majadahonda, un equipo de los mejores de la tabla en el que quería probarme y retarme a mí misma para ver hasta donde podía llegar”.
Aunque el amor por el deporte no le viene de mi familia, “mis padres siempre me han apoyado en todo” continúa Denisse. “Llevándome a entrenamientos, partidos… a competir fuera de la Comunidad, daba igual la hora y el día que fuese. Lo agradezco mucho porque sin ellos probablemente hoy no estaría aquí”.
Jeremy Trevithick (2002, Beirut) llegó a España a los 3 años y desde que empezó a jugar el rugby ha ocupado prácticamente toda su vida. “Entrenamientos, torneos, competiciones… tienes que sacrificar muchas cosas del día a día, pero a cambio te regala grandes enseñanzas y amigos. Conocí el rugby porque al vivir en Marbella siempre pasábamos con mi padre por delante del campo. Yo de pequeño jugaba al fútbol y al tenis y recuerdo que mi padre una vez me dijo que le gustaría que probase el rugby, aprovechando que teníamos amigos que jugaban en el Club y que yo ya lo tenía visto de pasar siempre por delante del campo”.
“Aun así, quizás el que más culpa tiene de que terminase jugando fue mi abuelo”, continúa Jeremy, “porque era árbitro de rugby y desde muy pequeñito me insistió en que lo probase. Con 4 o 5 años yo estaba más por la labor de seguir en el fútbol, pero finalmente le hice caso y fue la mejor decisión que he tomado en mi vida”. “Llevo desde los 8 años jugando, y he pasado por varios clubes y federaciones en ese tiempo. De los 8 a los 18 jugué en mi Club de infancia, el Marbella RC, al que se lo debo todo porque es donde aprendí a jugar a rugby y en el que hice amigos con los que sigo manteniendo la relación hasta el día de hoy. Lo llevo en el corazón y lo llevaré toda la vida. Después a los 18 me fui a El Salvador, donde jugué una temporada en DH y de ahí me marché a Francia dos años, al Brive, que en ese momento estaba en TOP14 pero yo jugaba en la liga Espoir”.
En cuanto a la llamada con Selección, ambos coinciden con estar viviendo un momento muy dulce en sus vidas. “No me lo esperaba para nada” asegura Denisse. “No era un objetivo que me hubiese marcado para este año, aunque es verdad que he trabajado mucho para mejorar y retarme a mí misma, y me lo tomo como una recompensa a todo ese trabajo. No hay mejor premio que poder aportar a tu Selección y estoy muy agradecida con la oportunidad que me han dado y aprovechándola para rendir al máximo y sumar todo lo que pueda al el equipo”.
“Cuando te llaman de la Selección española por primera vez… creo que le pasaría a cualquier persona, es un sueño cumplido”, nos cuenta Jeremy. “Yo no tuve la suerte de jugar en M18 por temas de COVID pero si de jugar con la M20 dos europeos, y en ambos quedamos campeones de Europa. Pero el sentimiento que se tiene al ser llamado por primera vez con una Selección senior, en este caso la de 7s… es diferente. Es verdaderamente un sueño que creo que todo jugador español tiene desde que toca un balón de rugby. Desde pequeño he admirado mucho a todos los jugadores de la Selección y tener la oportunidad de debutar en Series Mundiales es un privilegio. Creo que a todos los jugadores de España les encantaría poder estar en esta posición así que me siento muy afortunado, y no estamos jugando solo por nosotros sino por un país entero. Las ganas están y lo daré todo por los compañeros, el equipo y por defender esta camiseta”.
