Según un estudio que contabilizó las veces que durante el año 2019 se habló de un deporte en el Telediario de La 1, contando las ediciones de las 15:00 y de las 21:00 horas, el rugby entró en el top ten, por detrás de fútbol, baloncesto, tenis, automovilismo, motociclismo, ciclismo, atletismo, golf y balonmano. Es decir, que poco a poco el llamado deporte del balón oval se está haciendo un hueco en el panorama deportivo español.
En su idea de que el rugby tenga cada vez más visibilidad en nuestro país, la Federación Española de Rugby (FER) ha propuesto a Patricia García (1989) y Jaime Nava (1983) que sean embajadores del rugby español. Además de sus incuestionables méritos deportivos, en el caso de Patri todavía en activo y Jaime recientemente retirado, ambos han demostrado también su capacidad y su pasión por transmitir lo mucho que el rugby puede aportar a la sociedad, especialmente a través de sus valores.
En el que caso de Jaime Nava, quien hasta la temporada pasada fue capitán del XV del León, la idea es que siga ayudando al rugby español a tener más presencia en la actualidad deportiva y social, además de ser cada vez más inclusivo.
Ya desde antes de decidir dejar de jugar y despedirse ganando la Copa del Rey con el Alcobendas, Jaime ha demostrado un enorme compromiso con el rugby español en general y con la FER en particular, de ahí que con este nombramiento lo que se busca es también agradecérselo. El trabajo que Nava realiza actualmente en la empresa All&Go, desde la que transmite a las empresas los valores del rugby, también puede ser de gran ayuda para el desarrollo de nuestro deporte.
Por su parte, la olímpica Patricia García (39 caps con las Leonas XV y más de 200 con las Leonas7s en las World Rugby Seven Series) también lleva tiempo compaginando su faceta de jugadora internacional con labores de promoción del rugby en el mundo empresarial, así como de sus valores a través de su proyecto social Rugby Libre.
Jurado de los Premios Princesa de Asturias, su inquietud por llevar el rugby más allá de los terrenos de juego le ha convertido en una de las caras más visibles del rugby español, algo que desde la FER también se quiere, no solo reconocer, sino también aprovechar y, como en el caso de Jaime Nava, agradecérselo.